viernes, 22 de febrero de 2019

Un continente de contrastes - Diferencias regionales en América


América es un continente de contrastes que se evidencian en la historia, en el medio natural, en la población y su calidad de vida y en el desarrollo económico.
Desde un punto de vista histórico, América anglosajona fue colonizada  principalmente por ingleses, en tanto que América latina lo fue por españoles y portugueses. Cada uno de estos pueblos hizo distintos aportes culturales en relación con el idioma, la religión, la estructura de la sociedad, la organización jurídica, etc. Los ingleses se desplazaban con sus respectivas familias y por ello no se mestizaron con aborígenes y negras; en cambio, los españoles y los portugueses venían solos y se mezclaron con las distintas etnias.
El sistema anglosajón de colonización era metódico y de poblamiento por frentes continuos. Localizada en latitudes medias, dividieron las tierras que roturaban y cultivaban. Establecieron colonias agrícolas y construyeron puertos. En
cambio, el sistema español era urbano y administrativo y fue llevado a cabo, principalmente, por los soldados y los sacerdotes. Privilegiaron la fundación de ciudades que organizaban política y económicamente las áreas circundantes. El
fin principal fue la posesión de puntos estratégicos, con respecto a la comunicación, y de regiones de producción de metales preciosos como el
oro y la plata. Localizada principalmente entre los trópicos, fue una colonización cuya organización se basó en una red de establecimientos dispersos.

Desde un punto de vista físico, América presenta variedad de 'paisajes debido a la combinación de sus características geológicas, climáticas y biológicas. Se aprecian desde elevadas cordilleras hasta extensas llanuras, temperaturas extremas y biomas variados como la tundra, el del desierto, la selva y la estepa, entre otros. Esta diversidad biológica constituye un gran potencial
económico.

América presenta, también, profundos desequilibrios en la ocupación del territorio viualizados en una desigual distribución de sus habitantes. Las áreas con fuerte concentración de población y alta densidad demográfica contrastan
con las zonas escasamente pobladas. Por un lado, se encuentran los vacíos demográficos, es decir, aquellas áreas que no cuentan con buenas condiciones para el asentamiento del hombre y presentan bajas densidades poblacionales.
Entre ellas se destacan el Ártico americano por las bajas temperaturas, la Amazonia por las altas temperaturas y la excesiva humedad, los desiertos del Oeste de los Estados Unidos y la diagonal árida de América del Sur por la escasez de agua y las grandes cordilleras.

Por otro lado sobresalen las áreas intensamente ocupadas como la megalópolis atlántica del nordeste de los Estados Unidos y el área industrial de los Grandes Lagos. En América latina, la meseta central de México, el corredor industrial
del Brasil desde Río de ]aneiro hasta San Pablo  y el frente industrial argentino desde San Lorenzo (Santa Fe) hasta La Plata (Buenos Aires) constituyen
las áreas con la mejor comunicación, infraestructura y servicios.

También existen profundas desigualdades en la estructura y el desarrollo económico. La Revolución Industrial repercutió más rápido en América anglosajona que en América latina, por disponer de ricos yacimientos de hierro
y de carbón, entre otras causas. En la actualidad, América anglosajona posee alto desarrollo industrial y tecnológico y una economía dinámica basada en la exportación de productos de alto valor agregado. En cambio, la economía
de América latina está organizada en torno a la producción y la exportación de materias primas, cuyos precios están ca'da vez más bajos en los mercados internacionales en relación con los de los productos industriales. Este
hecho no favoreció el despegue económico y generó abultadas deudas externas que mantienen a muchos países en una dependencia financiera.


La calidad de vida también presenta notorias diferencias dentro de América. América anglosajona posee una elevada calidad de vida y un gran bienestar económico que llega a la mayoría de sus habitantes. Invierten ingentes recursos
para sostener un sistema educativo excelente en todos los niveles y con una oferta educativa generalizada. Asimismo, el sistema de salud y la obtención de un empleo 'son accesibles a casi toda la población. También cuenta con
equipamiento en infraestructura para el transporte y las comunicaciones,
la provisión de energía, el abastecimiento de agua, el saneamiento
y la recolección y la eliminación de residuos. Igualmente también presenta
problemas como el deterioro la población de América latina se enfrenta
a condiciones de pobreza con un alto índice de desocupación, escasez
de viviendas adecuadas, falta de infraestructura sanitaria y altos
índices de analfabetismo. Solo un reducido porcentaje de sus habitantes
disfruta de una alta calidad de vida. A esto se suma un elevado y
sostenido crecimiento de la población originando un círculo vicioso:
cada vez hay mayor población y cada vez hay mayor pobreza. América
anglosajona pudo regular su miento demográfico estableciendo incluso rígidos
cupos a la inmigración. Es por ello que sus montos poblacionales no son motivo de preocupación. Estas disparidades entre las situaciones económicas
de las distintas Américas se expresan vívidamente en las migraciones de población. La mano de obra disponible migra a otras tierras
en procura de un bienestar que le niega su propio país.

Fuente: Echeverría M.J. Capuz, S.M. 2012. Geografía de América Ed. A-Z (pag. 18 y 19)

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